Pensé que se iba.

En un mundo no muy lejano…
En un mundo cerca, muy cerca…
Me encontré en el camino hacia la rutina,
Un regalo…..
No pude verlo,
Tenia miedo de reconocerlo.

Se volvió a cruzar y me mostró que no había nada de que tener miedo.
Lo levante y lo guarde en mi bolsillo. No quise probarlo todavía…

Pasaron los días y comenzó a entrar en mi,
Lo ayude y llego hasta mi corazón,
Y como éste esta bien protegido, no quise abrirle las puertas enteras,
Al menos no pensé que lo estaba haciendo…

Llego un día, y pensé que se iba,
Pensé que volvía por donde vino,
Me di cuenta, que ya había entrado,
Y que se había vuelto parte de mi corazón,
Tomó un pedazo, y lo cuidó….
Con tanto cariño que cada vez el pedazo, se volvía mas grande…

Pensé que se iba, y supe que dejaría vacío un pedazo de mi…
Tuve miedo,
Pero esta vez, no era por que llegaba,
Sino porque se iba.

No supe que hacer….
Pues ya era mi corazón.
Por suerte, solo fue una tormenta en medio del verano…

Fue después de la tormenta,
Que me di cuenta, que eras mi corazón,
Que has entrado al lugar mas secreto y difícil de entrar….
Un lugar, donde solo vas a encontrar lindas cosas.
Un lugar donde el descubrir, es cotidiano…
Mi corazón ahora, se alimenta de ti…
Cada latido, busca de ti para continuar….
Cuídalo, quiérelo, protégelo,
Que él hará lo mismo por ti.